En el silencio ingrato de la fotografía.
Queda muerto el instante, embalsamado
Y no deja mas que el efímero destello
De una ilusión congelada...
Algo más que un sencillo recuerdo
Desdibujado en el tránsito tempestuoso de la vida.
En el espacio que queda entre bit y bit, se me quedó olvidada la libreta. Siempre me ocurre y siempre me ocurría, cuando las libretas tenían hojas de verdad y las palabras sonaban al escribirlas, mientras la punta de la pluma rasgaba las fibras del papel, dejando heridas de tinta en forma de versos, o de sueños, o de garabatos.
Sólo cambiando el punto de vista, nos llega el trasluz, aparece el entramado mortal de la araña, nos llega el verde luminoso de la clorofila y se ribetean de luz las hojas carnosas del agave. La perspectiva nos abre la visión y nos revela lo oculto.